domingo, enero 17

DECEPCIÓN

Siempre a tus espaldas, detrás tuyo.
El viento del Sahara me trajo tu aroma. Lo percibí y pensé que te había alcanzado. Sin embargo, giraste sobre tus talones y me miraste con burla en tus labios. Corriste, tan rápido, tan ligero como pluma.
No pude alcanzarte. O tal vez no quise. Permanecí sentada tratando de escribir tu nombre en la arena.
Ahora es hora de darte otro lugar. Plano corto. Me anticiparé al tiempo. Y aunque tu ausencia sea peor que la estación más fría del año, construiré mi muro de Berlín.
Volverás. Con algún vicio menos, pero con la pasión intacta. Descenderás como lluvia de verano. Escucharé tu fábrica de mentiras. Diré que no.
Me convertiste en inquilina de la soledad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario